La cocuiza (Fourcroya humboldtiana):
La cocuiza, pita, sisal, agave, cocuy, cucuyo o maguey, es una planta herbácea de la familia de las Amarilidáceas, perenne. Las hojas son basales en forma de rosetas numerosas, grandes (hasta de dos metros de longitud) carnosas, fibrosas, de color gris con bordes espinosos y que rematan en una larga púa muy aguda, ligeramente encorvada y bastante resistente.
Las flores crecen en un asta de cuatro a cinco metros de altura, cubierto de brácteas triangulares y que termina en una enorme inflorescencia en canículas (racimo compuesto), con una gran cantidad de flores amarillentas o verde amarillentas.
El fruto es una cápsula con numerosas morenas. Esta planta crece en los matorrales secos de la tierra templada. El asta o eje floral se llama quiote. Esta planta en francés se llama “agave”.
El jarabe de cocuiza (agave) se obtiene concentrando el jugo obtenido del corazón de la cocuiza. Por sus cualidades nutricionales, su alto poder adulcorante, su color claro y su gusto bastante neutro, se utiliza en muy numerosas preparaciones frías o calientes. Además, es una alternativa natural, ideal para endulzar postres, pastelería y bebidas. Es excepcionalmente rico en fructosa natural y de un poder endulzante superior a los azúcares tradicionales permaneciendo bajo en calorías, resalta verdaderamente el gusto de los alimentos gracias a su contenido en fructosa y su solubilidad.
Usos medicinales:
• El zumo hervido de las hojas de cocuiza se usa como antiabortivo y para eliminar cadillos y verrugas.
• Las raíces en infusión se consideran depurativas.
• Tomando dos vasos por día el cocimiento de la raíz de cocuiza, hace evacuar por la orina todos los gérmenes venéreos.
• La penca soasada y puesta en cualquier hinchazón o tumor los deshace rápidamente.
• La penca exprimida después de soasada y hervido el zumo hasta darle punto es un buen remedio puesto en una hilas para curar las úlceras, fístula y heridas; también se curan éstas con una sola aplicación de la hoja soasada y machacada.
• Para los calambres, se ata una madeja de cocuiza en la parte afectada o en la articulación superior y cesan prontamente.
• Para aclarar la voz, en caso de ronquera, se toma el zumo de la penca de cocuiza con papelón preferiblemente cruda.
La cocuiza, pita, sisal, agave, cocuy, cucuyo o maguey, es una planta herbácea de la familia de las Amarilidáceas, perenne. Las hojas son basales en forma de rosetas numerosas, grandes (hasta de dos metros de longitud) carnosas, fibrosas, de color gris con bordes espinosos y que rematan en una larga púa muy aguda, ligeramente encorvada y bastante resistente.
Las flores crecen en un asta de cuatro a cinco metros de altura, cubierto de brácteas triangulares y que termina en una enorme inflorescencia en canículas (racimo compuesto), con una gran cantidad de flores amarillentas o verde amarillentas.
El fruto es una cápsula con numerosas morenas. Esta planta crece en los matorrales secos de la tierra templada. El asta o eje floral se llama quiote. Esta planta en francés se llama “agave”.
El jarabe de cocuiza (agave) se obtiene concentrando el jugo obtenido del corazón de la cocuiza. Por sus cualidades nutricionales, su alto poder adulcorante, su color claro y su gusto bastante neutro, se utiliza en muy numerosas preparaciones frías o calientes. Además, es una alternativa natural, ideal para endulzar postres, pastelería y bebidas. Es excepcionalmente rico en fructosa natural y de un poder endulzante superior a los azúcares tradicionales permaneciendo bajo en calorías, resalta verdaderamente el gusto de los alimentos gracias a su contenido en fructosa y su solubilidad.
Usos medicinales:
• El zumo hervido de las hojas de cocuiza se usa como antiabortivo y para eliminar cadillos y verrugas.
• Las raíces en infusión se consideran depurativas.
• Tomando dos vasos por día el cocimiento de la raíz de cocuiza, hace evacuar por la orina todos los gérmenes venéreos.
• La penca soasada y puesta en cualquier hinchazón o tumor los deshace rápidamente.
• La penca exprimida después de soasada y hervido el zumo hasta darle punto es un buen remedio puesto en una hilas para curar las úlceras, fístula y heridas; también se curan éstas con una sola aplicación de la hoja soasada y machacada.
• Para los calambres, se ata una madeja de cocuiza en la parte afectada o en la articulación superior y cesan prontamente.
• Para aclarar la voz, en caso de ronquera, se toma el zumo de la penca de cocuiza con papelón preferiblemente cruda.
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